Pensamos que existimo como institución porque:

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Tenemos una función social que cumplir: que los seres humanos que llegan a nuestros claustros, dotados de una serie de capacidades y potencialidades puedan descubrirlas y desarrollarlas en condiciones favorables, orientarlas hacia la cristalización de sus proyectos de vida personal y profesional, garantizando mejores condiciones de vida tanto a nivel individual como social.

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El proceso de convertirse en persona y profesional docente, exige acciones mediadoras de la Institución Educativa y los maestros para orientar experiencias educativas de acuerdo con los niveles de desarrollo del estudiante (desarrollo físico, intelectual, psicológico, social, cultural, ético y moral) encaminados a la construcción del pensamiento científico, autónomo, crítico y creativo a partir de la interacción con el mundo de la vida y la reflexión permanente acerca del cómo y para que se educa y se aprende. Con nuestra propuesta Pedagógica se pretende formar para asumir responsablemente el proceso de formación Integral, desarrollando competencias que le permitan interactuar con eficacia en un mundo cada vez más globalizado.

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Consideramos que la Escuela Normal Superior debe crecer de manera continua, permanente y sostenida a través de procesos de mejoramiento continuo (Gestión de la calidad en Educación) y generar liderazgo pedagógico en la región, contando con la participación activa de los entes institucionales y comunitarios.

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Es indispensable la formación en valores que dignifiquen a la persona tales como autoconocimiento y autoestima, justicia, paz, tolerancia, honestidad, responsabilidad, respeto, cuidado y preservación del entorno.